jueves, 19 de abril de 2012

Maldito

Maldito seas.
¿Porque no me devuelves el don de la palabra?
¿PORQUE?

Que últimamente lo único que haya en mis hojas en sucio sean dibujos, me asusta, la verdad.
No se donde quedó ese aire...
No se donde están todas esas palabras que antes fluían.

No se que es lo que me has hecho.
Pero tan malo no será, porque inconscientemente te premio cada día, clavándote en mi pelo y usas mi moño como ventana al mundo.
Te afilo siempre cuidadosamente, para que conserves tu magnifico trazo...

Te perdono por esta vez.
Pero solo por esta.



miércoles, 4 de abril de 2012

Nameless

Allí estaba yo, abriendo mi caja llena de infancia.
Repleta de todos mis antiguos juguetes, cuando sin saber de donde, de entre una nube de polvo, salieron lo que parecían unas moscas no del todo normales.

Sobrevolaron mi cabeza e hicieron unas cuantas acrobacias antes de que una de ellas, casi rozara mi cara, dejando tras de si un velo de risas misteriosas.
Fue entonces cuando me di cuenta de que no se trataba de moscas comunes, sino de unas diminutas hadas que parecían buscar algo.

Las observé durante un instante. Eran tres diminutas, esbeltas y frágiles hadas.

Estaba maravillada, hasta que la risa de una de ellas me hizo saber de alguna manera que algo iba a pasar.
Y efectivamente pasó. Fue como si se parar el tiempo. Como si se rompiera el encanto. Fue como un soplido a la vela que ellas habían encendido.

Se posaron en mi mano y desde ella las 3 hadas me dirigieron una mirada que aún no logro entender.
Se arrodillaron a la vez y sin que nadie lo esperara me mordieron, intectando a la vez bajo mi piel algo desconocido para mi.

Era como un líquido amarillo que empezó a recorrer toda mi mano izquierda.
Inundando venas y vasos hasta supurar por todos los poros de mi mano.
Era como si algo me quemara por dentro. Un dolor insufrible.

Alzaron el vuelo las hadas y se posaron agonizantes cerca de mi.

Empezaron a perder su forma y se convirtieron en unas horribles pupas que jamás había visto.

El dolor hizo que centrara mi atención en la ahora hinchada y amarillenta mano.
Las uñas empezaron a despegarse, la carne empezó a perder consistencia y a agrietarse, dando paso a la caída de la misma.

Ante tal dolor y desesperación, me arrodillé para intentar ahogar los gritos contra el suelo.

Abrí los ojos y vi a las pupas hincharse, cual babosa cubierta de sal. Empezó a salir de ellas un líquido blanco fétido y luego explotaron sin más.

Dejándome allí, doblada en el suelo, viendo como iba perdiendo cada vez más trozos de mi.
Viendo como poco a poco iban saliendo a la luz los huesos corroídos por aquel liquido torturador.
Casi con los últimos músculos conseguí cerrar la mano y presenciar la horrible estampa de mi puño desnudo, tan solo con los huesos.
Y ver como se convertía en polvo...

Mientras al otro lado una lágrima recorría mi mejilla, para luego caer en mi almohada...

sábado, 17 de marzo de 2012

Y una vida que se vuela

Ahora sí.
Ahora ya dejo aquí mi réquiem para mi viejo camarada.
Que entre lágrimas escribo mis últimas palabras para él.

Fiel compañero esperó que todos cogieran sus aviones de vuelta a casa. Esperó que estuviéramos todos a su alrededor para decirnos adiós.
Desolada y triste ya no hago mas que recordar el momento de su ida.
El momento de mi lágrima sobre su lomo blanco.
El de mi beso en su cabeza.
De la caricia sosegadora.

"Te amo" fue lo último que fui capaz de susurrar junto a su oreja.

Hasta luego amigo.
Hasta luego hermano.

Sé que nos volveremos a encontrar.

domingo, 4 de marzo de 2012

Arena y risas

Se hunden mis dedos en la blanca arena mientras mi cuerpo sucumbe a la tentación de reír con vuestra risa.
Sol que ilumina escenas de miradas eternas y perdidas.
Va llegando la oscuridad. Nos atrapan las luces y ese olor a mar que tanto nos gusta.
Me miro y no me reconozco.
Este cuerpo ya no es capaz de contener mis sentimientos. Se ha quedado pequeño.

¿Será tiempo de mudar?
¿O simplemente de seguir disfrutando con el suave roce que mis sentíres antes de su caída?
Sí! Dejar que fluyan, que salgan para luego caer, elevarse y caer al mar.

Eso es lo que voy a hacer.

domingo, 26 de febrero de 2012

Ahogada

Sumergida.
Dejándome llevar por cientos de corrientes a 20 metros de profundidad.
Me golpea el pelo en la cara, dejándome entrever mi viaje.
Viaje desde la costa a la nada. Viaje de inspiración repentina, que llega atraída por el sonido de mi lágrima golpeando contra el suelo.

Puños cerrados, oscuridad...
Sentimientos que llegan y que no me dejan respirar.
Gritos de desesperación, impotencia...

Destellos de la energía y rabia salen de mi pecho.
Quédatelos.
Porque las palabras se las lleva el viento.


jueves, 16 de febrero de 2012

Anoche tuve un sueño...

2 extraños vagabundos recorrían una ciudad dormida sin más custodia que la de aquella enorme luna menguante reinando aquel cielo mucho más estrellado que de costumbre, que iluminaba la cara de él, dando paso a aquel juego de luces y sombras en la pupila de su ojo derecho.

Sus manos recorrían la cara de ella, por si algún día no podía volverla a ver y de mientras una lágrima luchaba por su libertad.
Cada caricia ponía la piel de su cuello de gallina.
Ella daba las gracias con la mirada.
- Gracias por seguir ahí a pesar del frío.Gracias por darme fuerzas para cambiar.

 Sus dedos ya no tienen otro vicio más que ir junto a los de ella.
Entrelazados como cada punto de la lana roja de esa futura bufanda.




jueves, 9 de febrero de 2012

Té de la India

Y allí estaba yo, con las mejillas rojas y con las manos rodeando aquella taza caliente de té.
El olor a cardamomo se eleva y se mezcla con el olor a coco del tuyo.
El silencio cada vez es menos importante.
Ya no me tapo la boca cuando se me escapa sin sentido alguno una carcajada.
Sigo el curso que la vida me tiene escrito, sin cuestionarme mi pasado ni hacer conjeturas de mi futuro, simplemente disfrutando de estas largas conversaciones sobre mi visión del alma y la tuya de la mente.

Salir a la calle y disfrutar de ese aire frío que golpea mi cara.
Disfrutar de todo, solo por el hecho de existir.
Fijarme en cada detalle, en cada pequeño detalle, hasta el punto de encontrar mi historia dibujada en las grietas y las humedades de una pared.

Llegó la hora de ser feliz.
Son las 18:18




Tempo di stare in punta di piedi.
Ora per mostrare ciò che sentiamo.